EL EMBARAZO... ¿DULCE ESPERA?

“Eso de llamar al embarazo “la dulce espera” no tiene sentido, no sé por qué le llaman así”, fueron las dramáticas palabras que mencionó mi ginecólogo en uno de los chequeos mensuales de mi embarazo, ¡Vaya manera de dar ánimos! A esta pobre mujer que deporsí ya vivía aterrada por todos los cambios que estaba pasando, y los que sabía que vendrían.
Pero pensándolo ahora que mi bebé tiene ya 6 meses de nacido, y con un poco más de sentido del humor, las palabras mencionadas por el doc no estaban tan alejadas de la realidad. Creo que el solo hecho de saber que seremos mamás, nos llena de miedo e incertidumbre a la mayoría de las mujeres, saber que serás mamá es hermoso pero… ¿y todo lo que conlleva?... aparecen cuestiones desde las más superficiales y ridículas como: ¡pareceré globo terráqueo! ¿Me saldrán estrías? ¿Volveré algún día a recuperar mi talla? ¿Me veré bonita como mamá? ¿Mi bebé será bonito? ¿Qué nombre le pondré?, etc.! Hasta las cuestiones realmente de importancia como: ¿qué pasará con mi vida profesional? ¿Será el momento indicado para ser mamá? ¿Mi bebé nacerá sano? ¿Estoy realmente lista para ser mamá? ¿Y si lo hago mal? ¿Seré una buena madre?, y miles y miles de preguntas que pueden surgir, pero creo que es lo maaas normal del mundo. Pero eso no es todooo!, por si fuera poco el montón de dudas existenciales que ya nos abruman, vienen en camino las lluvias hormonales que yo no sé cómo nos aguanta la gente de alrededor! Pobres esposos, pobres amigos, pobre de nuestras familias!! Porque si pensábamos que estar en nuestros días era la oportunidad de oro para sacar el mounstro que llevamos dentro, no hemos visto nada aún! Incluyéndome a mí, conozco a más de tres mujeres que qué miedo cruzárseles en su camino en algunos momentos durante el embarazo. Y si creemos que ya hemos tenido suficiente, déjenme les cuento, que nuestro lado sentimental se agudiza, tanto como para llorar hasta por que el aro de la taza del baño quedó arriba otra vez!. Y si a todo esto le sumamos todos los cambios físicos, las náuseas matutinas y hasta vespertinas!, Las molestias del último trimestre para caminar, estar sentada, parada, acostada y hasta para respirar, no poder dormir por el peso de la gran panza! Todo para finalmente después de esos largos y a la vez cortos nueve meses, poder abrazar y besar a ese pedacito de ti, poder cargarlo entre tus brazos, conocerlo, sentir su suave piel, sentir esa ternura que reflejan sus ojitos apenas entreabiertos y entonces EUREKA! En ese preciso instante te das cuenta de que esos nueve meses de espera en realidad no fueron tan malos y  han valido la pena, porque ahora realmente conoces el verdadero amor.

Y antes de ponerme más cursi me despido, espero que disfruten esta sección para las que ya somos mamás, las que piensan serlo y las que tienen amigas o conocidas que están en espera… y que me cuenten si su embarazo fue en realidad una dulce espera, o si tuvieron como yo una que otra falla técnica durante el camino a la maternidad. Hasta la próxima!!